Edición #22

No existe Marca sin Producto: El producto eres tu

Hablar de marca personal dejó de ser un tema exclusivo de gente famosa o importantes empresarios.  Hoy por hoy por diseño o por “azar” todos tenemos una marca personal y cada vez es más evidente la importancia de construir una marca sólida y memorable. Sin embargo, en medio de la búsqueda de estrategias ingeniosas y tácticas brillantes para “ser reconocido”, a veces se pasa por alto un principio fundamental: no puede haber una marca sin un producto sólido detrás. Y en el ámbito de la marca personal, ese producto eres tú.

En un escenario profesional altamente competitivo y en constante evolución, es crucial entender que la marca personal y el producto que representa están intrínsecamente vinculados.

Aquí es donde radica la esencia del concepto: “El producto eres tú”.

La Importancia del “Producto” en la Marca Personal

En el corazón de cualquier marca personal exitosa se encuentra la entrega de valor tangible y diferenciado. Así como un producto en el mercado debe superar las necesidades y deseos de su audiencia, tú como profesional debes desarrollar habilidades, conocimientos y experiencias que resuelvan los problemas y agreguen valor a tu publico objetivo (empleador, clientes, compañeros y socios, etc.)

Al igual que una empresa define el concepto y propuesta de valor de sus productos con claridad y precisión, tú también debes definir qué te hace única y valiosa, esto es, tu propuesta de valor personal. ¿Cuáles son tus habilidades distintivas? ¿Qué experiencia y conocimientos puedes ofrecer que te diferencian de otros en tu campo? Esto te ayudará a establecer una base sólida para construir tu marca personal. Una de mis herramientas favoritas para hacer esto es la pirámide de posicionamiento.

Innovación Constante

Todos los productos en el mercado tienen un ciclo de vida, por lo que constantemente se rediseñan, actualizan e incluso se reinventan para mantener su relevancia y competitividad.

De igual manera, tú también debes estar en constante desarrollo y mejora. Esto implica invertir en tu educación, adquirir nuevas habilidades, expandir tu red de contactos y buscar oportunidades de crecimiento profesional.

Ahora sí, la promoción efectiva de tu marca

Una vez que tienes claridad de quien eres como “producto”, es fundamental comunicarlo de manera efectiva a través de tu marca.

Esto implica entender cuáles son tus canales y como te relacionas y llegas a tus públicos de interés actuales y potenciales. Aquí es donde tu presencia en línea, redes sociales, CV, entrevistas y cualquier otra interacción profesional sirve de medio para entregar tu propuesta de valor única.

La Medición del desempeño de tu Marca

Al igual que una empresa mide el éxito de su producto mediante indicadores clave de rendimiento (KPIs), tú también debes medir el éxito de tu marca personal. Esto puede incluir el número de conexiones y seguidores en redes sociales, el nivel de participación en tus publicaciones, el número de oportunidades laborales o clientes generados, entre otros.

En resumen, así como en el mundo empresarial el producto y la marca están intrínsecamente entrelazados, no existe una marca personal sólida sin un producto sólido detrás, y ese producto eres tú misma. Comprender la importancia de este principio y aplicarlo de manera efectiva te ayudará a construir una marca personal poderosa y relevante en el tiempo.